LA INAPETENCIA
de Rafael Spregelburd
Un ama de casa conservadora -con
los clásicos prejuicios morales sobre la
familia, los hijos y el deseo- intenta no
quedarse afuera de ciertas prácticas sexuales
que supone habituales en su entorno más cercano
integrado por su marido, su hijo y sus amigas.
El
deseo sexual y la familia, la comida (como
metáfora de ese deseo), la oposición entre lo
antiguo y lo moderno, lo viejo y lo nuevo, son
los temas principales de
La inapetencia,
esta obra inédita en el país del prolífico y
multifacético Rafael Spregelburd.
Con
un tono desopilante y absurdo queda expuesto el
mecanismo de funcionamiento del sentido común:
hay algo que se debe desear y algo que se debe
decir pero el plato que tanto parece tentar,
finalmente, nadie lo come.
La inapetencia fue estrenada
sólo en Europa y por primera vez se monta y
estrena en Bs As.
Estreno
para público y prensa:
Sábado 4 de octubre 21hs.
Funciones:
Sábado 21 hs.
Teatro "La Carbonera":
Balcarce 998, esquina Carlos Calvo, San Telmo,
CABA.
Reservas:
4362 2651
Entrada
general:
$100
Estudiantes y
jubilados:
$70
Síntesis argumental
La Sra. Perrotta siente que no puede quedarse
afuera de las prácticas que en su entorno se
están volviendo tan cotidianas. Su marido, sus
amigas y su hijo mayor están sumergidos en el
mundo del sadomasoquismo y lo practican con
frecuencia, o por lo menos así lo cree ella.
Luego de fracasar en el intento de incurrir en
este mundo, la angustia por sentirse marginada
se le mezclará con deseos frustrados de ser
feliz con su hija, la humillación de parte de
sus jóvenes amigas y una discusión familiar
llena de reproches a su figura materna.
La inapetencia pone sobre la mesa dos temas
fundamentales, el sexo y la familia. ¿No es
acaso el deseo una construcción cultural? En
esta obra la carnada es llevada al extremo:
Sadomasoquismo, orgías, sexo con dolor. Los
personajes parecen exhibir mucho sus fantasías y
deseos pero parecen estar deshabitados de
verdadera pasión. Con tono desopilante y
absurdo, queda expuesto el mecanismo de
funcionamiento del sentido común. Hay algo que
se debe desear y hay algo que se debe decir,
pero el plato que tanto parece tentar finalmente
nadie lo come. Con respecto a la familia, no
queda más que resignarse ante la imposibilidad
de formar una familia tipo, una hija que se va
en busca de una causa noble que nunca encontró
en su núcleo familiar y un marido que no
encontró una buena manera de resolver sus
deseos. Los ideales quedan reducidos, esta vez,
un capricho de la hija adolescente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario